Share

Entrevista con Rosa Soto, Gerente de Sostenibilidad de Acciona Energía

 

Entrevistamos a Rosa Soto, Gerente de Sostenibilidad en Acciona Energía.

La creciente demanda de información ASG (ambiental, social y de gobierno corporativo) por parte de sectores como la banca y la inversión está poniendo a las empresas frente a un nuevo e imparable contexto de cambio tanto a nivel de mercado como en la regulación. ¿Qué papel tienen la actual y la futura Directiva sobre información de sostenibilidad corporativa y los Estándares en la gestión de la sostenibilidad ? ¿Cuáles serán sus beneficios para las empresas? Sustentia habló sobre ello con Rosa Soto, Gerente de Sostenibilidad de Acciona Energía, eléctrica más sostenible de España y segunda del mundo, según Dow Jones Sustainability Index.

Según su experiencia, ¿Cuáles son los puntos fuertes y débiles de la actual Directiva de la UE sobre información no financiera y cómo cree que se mejorará en la nueva Directiva sobre información de sostenibilidad corporativa?

La actual Directiva de información no financiera marcó un hito, contribuyendo a la implementación y consecución de objetivos de sostenibilidad en las empresas. Esta Directiva, por un lado, incorpora a organizaciones que hasta el momento estaban fuera del alcance del Reporte en materia de información no financiera y por otro, apoya el posicionamiento de la sostenibilidad como concepto prioritario y aumenta su visibilidad y necesidad de informar al respecto.

La nueva Directiva se prevé que amplíe el ámbito de aplicación a un mayor número de empresas, lo cual siempre es positivo en la medida en la que contribuye a la rendición de cuentas y la transparencia.

Como puntos de mejora, los cuales se pretenden abordar con la nueva Directiva, destacamos, en primer lugar, la intención de fortalecer y apoyar la inversión sostenible. De esta manera se fomenta la transición hacia un modelo económico basado en la sostenibilidad requiriendo al reporte de información ASG de manera mucho más detallada de las actividades de las empresas.

En segundo lugar, en la actual Directiva se trataba de manera ambigua el concepto de la `doble materialidad` lo que implica que los informes no financieros no permitan comprender las repercusiones reales, los riesgos e impactos de sus operaciones y los planes de acción relacionados de las empresas en materia de derechos humanos y medio ambiente.

En concreto, se ha evidenciado que el sistema actual de informes no financieros no garantiza el respeto por parte de las empresas a los derechos humanos y el medioambiente en las cadenas de suministro globales. En este sentido, con la nueva Directiva, la información presentada por las empresas se espera que sea más exhaustiva, material y conforme a los estándares de información internacionales, por ejemplo, los Principios Rectores de ONU sobre empresas y derechos humanos.

Por último, destacar que se espera que esta nueva Directiva mejore la heterogeneidad actual a nivel de reporte de esta información, de manera que se permita la comparabilidad y se desarrolle un marco único.

¿Qué considera innovador/pionero en los informes de sostenibilidad de su empresa, y cómo cree que se podría compartir esta práctica en la nueva Directiva?

Lo innovador o diferenciador de ACCIONA y sus reportes en materia de sostenibilidad es el modelo de negocio en sí mismo, basado en soluciones sostenibles y plasmado en la memoria de sostenibilidad. En este momento, uno de los atractivos del grupo es su capacidad de crear sinergias entre los proyectos y proponer soluciones basadas en la sostenibilidad a diferentes necesidades, al mismo tiempo y para cualquier región.

En la Memoria de Sostenibilidad se hace balance del Plan Director de Sostenibilidad (PDS) de ACCIONA (en la memoria de 2020 en concreto al PDS 2015-2020) que abarca cinco años de trabajo y esfuerzo por convertir la sostenibilidad en el propósito estratégico de la compañía. En el último ejercicio, dicha memoria se ha estructurado en base a los cuatro pilares del nuevo PDS 2025 lo cual crea el hilo conductor en el reporte de la información.

¿Qué beneficios ve usted y su empresa en el desarrollo de los Estándares Europeos para la elaboración de Informes de Sostenibilidad?

Sin duda, el desarrollo de estándares en materia de sostenibilidad refuerza la importancia de mejorar el desempeño por parte de las empresas en la materia, de avanzar en un reporte más exhaustivo y claro, y de dar respuesta a la creciente demanda de información transparente y comparable de los grupos de interés.

«El desarrollo de Estándares de elaboración de estos informes plantea muchas oportunidades para que las empresas incorporen los aspectos relacionados con la sostenibilidad y sienta las bases para realizar reportes que se adapten a los requisitos exigibles en su desempeño. Su desarrollo a nivel europeo marca la hoja de ruta hacia una economía sostenible que esté alineada con los estándares y marcos existentes».

La investigación de la Alianza para la Transparencia Corporativa ha demostrado que a las empresas les resulta más difícil traducir los riesgos e impactos de la empresa para las personas y el planeta, en objetivos específicos y luego informar de forma continua sobre los progresos reales que se están realizando en el cumplimiento de esos objetivos. ¿Está usted de acuerdo en que esto debe ser abordado en la nueva Directiva y Normas? ¿Tiene algún comentario sobre cómo se puede lograr?

La incorporación de la gestión de riesgos no financieros (Derechos Humanos, cambio climático, anticorrupción y ambientales, entre otros) en la gestión de los negocios es, sin duda alguna, un reto para todas las empresas, pero clave para lograr una transición de la economía sostenible. En ACCIONA se realiza un análisis considerando cuatro perspectivas: la de mercado, la financiera, la de tendencias emergentes (incluyendo ciberseguridad) y la ESG.

En 2020, se ha mejorado el modelo de gestión de riesgos ESG a través de una nueva herramienta interna estableciendo un mecanismo que es clave a la hora de tomar decisiones sobre asuntos que se encuentran interrelacionados, como es el caso de los escenarios de estos riesgos extra-financieros. No sólo facilita estudiar el riesgo como ente aislado, sino también según sus vínculos con los otros riesgos.

Sin duda, la nueva Directiva y las normas en elaboración deberían establecer el marco de actuación para identificar los riesgos e impactos ESG y su posterior gestión en línea con los estándares internacionales.

Hay posiciones a favor de que las empresas de propiedad extranjera que operan en el Mercado Único Europeo y las empresas más pequeñas en sectores de alto riesgo, también estén sujetas a la nueva Directiva sobre información de sostenibilidad corporativa y a los Estándares. ¿Está usted de acuerdo, y qué beneficios ve en términos de competencia y en la consecución de la «debida diligencia» para la cadena de suministro de su propia empresa?

Personalmente me parece un giro necesario, y que en la actualidad no estaba considerado. Nos parece una buena decisión que se amplíe el alcance de las empresas a las que les aplique la nueva Directiva ya que es una manera de marcar requisitos mínimos en materia de sostenibilidad y motivar el desarrollo de objetivos y acciones que promuevan la transición hacia una economía con criterios ESG.

Por último, ¿Cree que es suficiente el ritmo de transición hacia una economía sostenible en Europa y en el mundo, y qué espera de la nueva CSRD y de los Estándares de Sostenibilidad para que esto se pueda conseguir?

Sinceramente, consideramos que en términos generales el ritmo no está siendo lo suficientemente rápido para lo que debería ser si queremos cumplir con las ambiciones establecidas en acuerdos internacionales como el Acuerdo de Paris o para cumplir con los ODS y la Agenda 2030. Pero, sí hay sectores que están tomando la iniciativa y están impulsando y propiciando el cambio. ACCIONA es de esas empresas líderes en sostenibilidad que está impulsando un modelo de negocio regenerativo y apostando por ser un agente de cambio hacía una economía sostenible.

La CSDR, así como los Estándares de Sostenibilidad deberían conformarse como una herramienta para impulsar el desarrollo de una nueva forma de abordar la gestión de los aspectos de ESG (protección del medio ambiente, respeto a los derechos humanos y desarrollo social, y promoción del buen gobierno) en las empresas y su reporte sobre una base de transparencia y accesibilidad a la información.

Esta Directiva y los Estándares a desarrollarse deberían contribuir a una mejor anticipación de los riesgos de las empresas y una mayor posibilidad de creación de valor para la organización y para la sociedad, simplificando al mismo tiempo el proceso de reporte para las empresas, haciéndolo más claro y manejable para los `grupos de interés`.